Pero lo que si estoy segura que es muy fácil, es el consentirte. Pero esa palabra es muy fuerte dentro de mi vocabulario. Consentirme no significa dejar de pensar en los demás, y volverte un egoísta. Pero si puede significar, el poder darle un regalo a tu alma y respirar profundamente y saborear algo mas que un dulce, un postre. Mi abue algún día me dijo, que no era malo auto regalarnos un cariñito, claro cada quien conoce sus limites de que tan grande el cariñito seria.
Para mi caminar y encontrar una banca donde pueda leer, una librería, un rico cafe, tal vez la esquina de mi cuarto. Es regalarme ese postre que mi alma lo anhela todos los días. Es leer mi mas profundo libro, frase, o chiste.
Tu alma te escucha, también siente, y por que no también te da corazonadas y te avisa cuando algo no esta bien.
Si aun no reconoces escuchar tu alma, te invito a que la escuches...




